¿Qué es la automatización de TI?

Permite a las empresas crear e implementar flujos de trabajo de automatización que reducen el tiempo que los trabajadores humanos dedican a completar tareas manuales que requieren mucho tiempo. La automatización de TI es un componente integral de la estrategia de TI moderna y de las iniciativas de transformación digital.

Gestionar y coordinar centros de datos dispersos geográficamente y arquitecturas de nube híbrida es una carga de trabajo monumental. Estos entornos suelen incluir redes virtualizadas, aplicaciones de microservicios, requisitos de seguridad en evolución, ciclos continuos de entrega de software y otros componentes característicos de las redes informáticas modernas. Además, las expectativas de los clientes son igualmente excepcionales, con conexiones rápidas y un tiempo de inactividad mínimo que ahora son la norma operativa. La automatización de TI ayuda a las empresas a enfrentar ese desafío.

El software de automatización proporciona a las empresas la agilidad y la flexibilidad necesarias para escalar y asignar recursos en función de la demanda en tiempo real, una parte importante de la consecución de los objetivos de costos y rendimiento. Por ejemplo, los desarrolladores pueden usar scripts de automatización para aprovisionar automáticamente recursos, configurar y gestionar redes y servicios en la nube, hacer cumplir la seguridad y acelerar el proceso de DevOps y la entrega de servicios.  

Con las soluciones modernas de automatización de TI, los equipos pueden usar una única plataforma para supervisar y optimizar los flujos de trabajo, los trabajos y los procesos por lotes (como la configuración de la red, el aprovisionamiento de usuarios y la gestión de parches).

Estas soluciones permiten al personal de TI sénior dedicar su experiencia a proyectos más estratégicos, en lugar de dedicar tiempo a probar scripts para flujos de trabajo rutinarios. Las empresas pueden incluso aprovechar la automatización de TI, y el mayor ancho de banda que proporciona a los profesionales de TI, para explorar el impacto de las nuevas tecnologías, como la IA generativa y la computación cuántica.

En muchas aplicaciones diferentes, la automatización de TI puede ayudar a las empresas a escalar más rápido, con menos errores, y brindar servicios con mayor velocidad y seguridad. 

En esencia, la automatización informática consiste en ejecutar scripts que definen y llevan a cabo una secuencia de acciones específicas. Estas acciones pueden desencadenarse manualmente, según un calendario establecido o por eventos específicos (por ejemplo, actualización de una base de datos tras un determinado evento). Si un proceso es complejo, los equipos de TI pueden combinar varias secuencias de comandos en una serie para crear un flujo de trabajo de automatización más intrincado.

Las herramientas de automatización de TI de nivel empresarial pueden automatizar una variedad de tareas, desde el aprovisionamiento en la nube y el despliegue de aplicaciones hasta la automatización del flujo de trabajo y la gestión de proyectos.

Supongamos que una empresa contrata a un nuevo empleado. Cuando la información del nuevo empleado se introduce en la base de datos respectiva, las características automatizadas de aprovisionamiento pueden configurar las cuentas del usuario; conceder acceso a las plataformas SaaS, aplicaciones y datos adecuados; e iniciar los mecanismos de incorporación.

La automatización es aún más poderosa cuando se mejora con inteligencia artificial (IA) y machine learning (ML), como es el caso de AIOps. Las características de IA y ML permiten la automatización inteligente, donde los algoritmos analizan datos estructurados y no estructurados para ayudar a las herramientas de automatización a evaluar, aprender y optimizar los flujos de trabajo de automatización.

Por ejemplo, los modelos de IA pueden analizar el comportamiento de los usuarios y los patrones de tráfico de red para identificar posibles amenazas cibernéticas. Si el modelo detecta una amenaza, la plataforma de automatización inicia los protocolos de seguridad necesarios, incluyendo el aislamiento de amenazas, las copias de seguridad de datos y los procesos de alerta.

La automatización de TI generalmente incluye cuatro fases clave:

1. Análisis. Antes de que los equipos puedan automatizar tareas y procesos, primero deben decidir cuál es la mejor manera de utilizar las herramientas de automatización. Este proceso incluye consultar con administradores y stakeholders para comprender los objetivos comerciales, evaluar minuciosamente cada tarea y decidir si los trabajos requieren o podrían beneficiarse de la automatización, y en qué medida.¹
   
   
2. Implementación. Luego de definir las tareas de automatización, el personal de TI puede convertirlas en conjuntos de instrucciones, como scripts o elementos de automatización.
   
   
3. Integración. En esta fase, los equipos prueban y validan el script de automatización para asegurarse de que se active correctamente y produzca los resultados previstos. Y si el script pasa la validación, el personal de TI puede integrarlo en la plataforma de automatización más amplia para su uso rutinario.
   
   
4. Mantenimiento. Los elementos de automatización deben evolucionar a medida que cambian las pilas, los recursos y las necesidades empresariales, por lo que los equipos de TI deben revisarlos y actualizarlos periódicamente para ayudar a garantizar un rendimiento óptimo.

Cualquier tarea de TI que sea repetible es una fuerte candidata para la automatización parcial o completa. La automatización de estas tareas permite a las empresas mantener operaciones más rápidas, congruentes y eficientes en todos los casos de uso, tecnologías y entornos (incluidos contenedores, entornos de nube y entornos de edge computing, pipelines de DevOps y prácticas de seguridad).

Las aplicaciones comunes de la automatización de TI incluyen:

La gestión de la configuración es un proceso de ingeniería de sistemas que ayuda a las empresas a mantener la calidad del rendimiento y la funcionalidad de un producto, sistema u otro activo de TI a lo largo de su ciclo de vida. Las prácticas de gestión de configuración permiten a los administradores de sistemas dar seguimiento al estado de los activos (como sistemas informáticos, servidores y aplicaciones) para que los equipos puedan identificar problemas rápidamente, gestionar eficazmente el control de cambios y evitar desviaciones de la configuración y tiempos de inactividad innecesarios.

Las empresas emplean herramientas de gestión de la configuración para establecer y mantener ajustes en entornos informáticos, dispositivos, flujos de trabajo y mucho más. La automatización de los procesos de configuración permite a los equipos informáticos desplegar, actualizar y retirar rápidamente componentes de infraestructura, y mejorar el rendimiento y la seguridad del sistema.

El aprovisionamiento se refiere al proceso de configuración de infraestructura de TI, que incluye hardware, redes, máquinas virtuales y otros recursos, y poner los recursos y los datos a disposición de los sistemas y los usuarios. El aprovisionamiento de recursos es más específico y se refiere a la asignación y configuración de los recursos (como CPU y almacenamiento) que una aplicación o servicio necesita para operar.

Tanto los procesos de infraestructura como los de aprovisionamiento de recursos se pueden mejorar mediante la automatización. Con el aprovisionamiento automatizado, las organizaciones pueden codificar configuraciones de infraestructura y recursos, y establecer flujos de trabajo repetibles, lo que hace que el proceso de aprovisionamiento sea más rápido, más preciso y más flexible.

La infraestructura como código (IaC) es un gran ejemplo de aprovisionamiento automatizado. Utiliza un lenguaje de programación descriptivo de alto nivel para automatizar el aprovisionamiento de infraestructura de TI, de modo que los desarrolladores no tengan que aprovisionar y gestionar manualmente los componentes de la infraestructura cada vez que quieran desarrollar, probar o desplegar una aplicación.

La automatización de redes es un proceso que automatiza la configuración, gestión, pruebas, despliegue y operaciones de redes físicas y virtuales y dispositivos de red. Reduce la cantidad de recursos que los desarrolladores gastan gestionando y aprovisionando redes informáticas.

Las herramientas de automatización pueden ejecutar procesos, como configuración y pruebas de red, aprovisionamiento de recursos, equilibrio de carga y despliegue de flujos de trabajo, que ayudan a los equipos de TI a mantener un servicio coherente e implementar actualizaciones y despliegues más rápidos. 

Muchas empresas emplean arquitecturas de nube híbrida, que incluyen centros de datos on premises y entornos de nube pública y nube privada. La computación en la nube puede ofrecer una orquestación, gestión y portabilidad de aplicaciones superiores, pero maximizar su valor a menudo requiere herramientas de automatización que puedan elegir el entorno óptimo para cada carga de trabajo.

En la actualidad, el 77 % de las empresas emplean arquitecturas de TI híbridas y necesitan herramientas de orquestación que funcionen en todos los entornos^.2 Los servicios de automatización en la nube ayudan a los equipos a cambiar y orquestar cargas de trabajo entre entornos de manera rápida (en tiempo real, en algunos casos) y con precisión.

La orquestación permite la gestión coordinada de múltiples procesos de automatización, agregándolos a flujos de trabajo de extremo a extremo. La automatización de la orquestación ayuda a garantizar que cada tarea desencadene correctamente la siguiente, lo que reduce la necesidad de intervención manual y permite operaciones totalmente automatizadas.

Ya sea que las empresas utilicen pipelines de integración y despliegue continuo (CI/CD) o enfoques más tradicionales, el desarrollo de software moderno depende de una automatización confiable. La automatización del despliegue permite a los desarrolladores integrar, probar y desplegar automáticamente los cambios de código, creando bucles de retroalimentación rápidos y acelerando los lanzamientos de software.

Los procesos de despliegue automatizados son especialmente importantes durante las etapas de prueba y lanzamiento de productos. Sin embargo, las pruebas automáticas de código y rendimiento a lo largo del ciclo de vida del desarrollo pueden ayudar a los equipos de DevOps a aumentar de forma proactiva la calidad del código e identificar problemas de forma temprana.

La migración de TI, que incluye la migración a la nube , la migración de datos, la migración de aplicaciones, la migración del sistema operativo y la migración de máquinas virtuales (VM), es el proceso de mover datos y software entre sistemas.

Los proyectos de migración pueden ser complicados, porque los planes de migración suelen adaptarse a las necesidades específicas de la organización. La automatización de los procesos de migración puede ayudar a optimizar y acelerar estos proyectos.

La sincronización automatizada de datos (el proceso de actualización automática y continua de los registros de datos para garantizar la uniformidad en todos los sistemas y dispositivos de la red) ayuda a las organizaciones a mantener un almacén de datos preciso y actualizado.

Sin herramientas de sincronización de datos, los equipos tendrían que recurrir a la tediosa entrada manual de datos para propagar los cambios de registros en todo el entorno de TI. Con las herramientas de sincronización, los equipos pueden automatizar los procesos de manejo de datos, lo que ayuda a las empresas a minimizar la pérdida de datos, optimizar la gestión de datos y usar sincronizaciones precisas y rápidas.

La seguridad de TI se centra en implementar medidas para proteger los entornos de TI de amenazas cibernéticas, filtraciones y otras formas de acceso no autorizado. La protección de los sistemas de TI solía ser una consideración posterior al desarrollo, pero muchas empresas ahora priorizan la seguridad a lo largo del ciclo de vida del producto. 

La automatización de la seguridad utiliza software para detectar, prevenir, analizar y corregir automáticamente las vulnerabilidades de ciberseguridad. Por ejemplo, las empresas pueden utilizar la automatización de la seguridad para configurar el acceso de los usuarios a aplicaciones y servicios a través de sistemas de gestión de identidad y acceso (IAM). La seguridad automatizada no solo acorta los tiempos de respuesta a incidentes, sino que también reduce los errores de configuración, los riesgos de cumplimiento y el tiempo medio de reparación (MTTR).

Los desarrolladores pueden optar por adoptar varios tipos de automatización de TI, incluyendo:

BPA es una estrategia que utiliza software para automatizar procesos comerciales complejos y repetitivos. Estos procesos incluyen actividades de "dirección del negocio", como la incorporación de empleados, la adquisición de nuevos clientes, el procesamiento de pedidos y la gestión de inventario. BPA se diferencia de otros tipos de automatización debido a su complejidad y su conexión con múltiples sistemas de TI empresariales.

Debido a que BPA generalmente se personaliza según las necesidades específicas de una organización, es una herramienta eficaz para optimizar las operaciones diarias que mantienen a las empresas funcionando sin problemas.

La entrega continua ayuda a los equipos de desarrollo a automatizar el proceso que mueve el software a través del ciclo de vida de desarrollo de software y entrega aplicaciones. Permite a los desarrolladores entregar automáticamente el código de la aplicación (por ejemplo, actualizaciones, arreglos y nuevas características) al entorno de infraestructura adecuado, y ayuda a los equipos a mejorar la seguridad y la velocidad de la entrega de software.

Los contenedores Kubernetes (K8s) son componentes de aplicaciones ligeros y ejecutables que combinan el código fuente con todas las bibliotecas y dependencias del sistema operativo, necesarias para ejecutar el código en cualquier entorno.

La automatización de Kubernetes simplifica el proceso de configuración para desplegar y mantener los contenedores de Kubernetes, que sustentan muchas de las aplicaciones empresariales actuales.

La automatización del flujo de trabajo es el proceso de automatizar el flujo de documentos, datos y tareas en todas las actividades relacionadas con el trabajo. Mediante el uso del software de gestión de tareas, los equipos de TI pueden enrutar automáticamente tareas y procesos de negocios a equipos, departamentos y flujos de trabajo en toda la empresa.

Los flujos de trabajo automatizados eliminan la gestión de tareas y procesos de las manos de los trabajadores humanos, y permiten a las empresas optimizar los flujos de trabajo, maximizar la productividad de los trabajadores y aumentar la eficiencia general de las empresas.

La automatización inteligente, a veces llamada automatización cognitiva, es el uso de IA, procesamiento de lenguaje natural (PLN) y automatización de procesos robóticos (RPA) para agilizar y escalar la toma de decisiones en todas las organizaciones. Por ejemplo, un proveedor de seguros puede utilizar IA para calcular pagos, estimar tarifas y abordar las necesidades de cumplimiento.

Debido a que la IA se basa en modelos de IA previamente entrenados, algoritmos de machine learning (ML) y herramientas de analytics de datos, requiere menos datos, e incluso menos intervención humana, para identificar tendencias de datos y optimizar los flujos de trabajo de automatización.

La automatización robótica de procesos (RPA),también conocida como robótica de software, utiliza interfaces de programación de aplicaciones (API), scripts y tecnologías de automatización inteligente para completar tareas repetitivas entre aplicaciones empresariales y de productividad.

Mediante el uso de software basado en reglas, la RPA puede completar trabajos de forma autónoma y ejecutar procesos (como extraer datos, completar formularios y mover archivos) sin recursos humanos.

La automatización frontend se centra en agilizar los procesos de configuración y mantenimiento que admiten una interfaz de usuario (un sitio web, por ejemplo). Permite a los equipos completar rápidamente tareas, como el monitoreo de usuarios, las pruebas de sitios web y la entrada y extracción de datos, y crear experiencias de usuario sin fricciones.

La automatización backend, también llamada automatización de cargas de trabajo o automatización de API, aprovecha la naturaleza conectiva de las API para automatizar sistemas y procesos de backend de alta capacidad. Incluye el procesamiento de bases de datos y la automatización de la migración, la automatización de la transferencia de archivos, la automatización del descubrimiento de servicios (que permite que los servicios y microservicios se descubran e interactúen entre sí a través de una red) y la automatización de pruebas para funciones de backend.

La automatización backend permite a las empresas evaluar y optimizar las funciones de backend para que las aplicaciones sigan siendo rápidas, confiables y escalables.

Para que la automatización de TI tenga éxito, las empresas deben elegir qué procesos y trabajos manuales automatizar. Por lo general, deben trazar y analizar completamente los procesos; estandarizarlos y evaluar su impacto, complejidad y criticidad; y monitorear continuamente los flujos de trabajo de automatización en busca de oportunidades de optimización.

Sin embargo, el éxito de la automatización también depende de cómo los desarrolladores decidan implementarla. Las empresas pueden elegir entre una variedad de estrategias, que incluyen:

Los términos automatización de TI y orquestación de TI a menudo se usan indistintamente. Y aunque ambas son herramientas invaluables para gestionar entornos de TI, difieren en sus objetivos y propósito.

La automatización de TI emplea la tecnología para gestionar tareas y procesos individuales de forma automática, como la realización de copias de seguridad, la aplicación de actualizaciones de software y la supervisión de sistemas. La automatización de estas tareas rutinarias libera tiempo y recursos valiosos para los equipos de TI

La orquestación es el proceso de coordinar y gestionar varias tareas automatizadas, o flujos de trabajo completos, de forma unificada. El objetivo principal de la orquestación es mejorar la eficiencia operativa general, reduciendo los costos y aumentando la escalabilidad.

En resumen, la automatización maneja trabajos individuales, mientras que la orquestación coordina múltiples tareas automatizadas para administrar procesos más amplios y complejos.

Las empresas que buscan desplegar herramientas innovadoras de automatización de TI no tienen escasez de opciones.

Por ejemplo, con las herramientas de automatización impulsadas por machine learning (ML), los desarrolladores pueden procesar grandes conjuntos de datos, identificar patrones en los datos de rendimiento, asignar dinámicamente Recursos y escalar entornos de TI en tiempo real.³ También ayudan a optimizar DevSecOps, una práctica de desplazamiento a la izquierda que incorpora la seguridad al comienzo del proceso de desarrollo, para que los desarrolladores puedan ofrecer productos más seguros.

Además, los agentes de IA están preparados para transformar las operaciones específicas de las industrias, especialmente en ingeniería y finanzas, donde pueden ofrecer insights y soluciones de automatización conscientes del contexto.⁴ La IA agéntica se refiere a los sistemas autónomos impulsados por la inteligencia que operan de forma independiente en diversos entornos, sin entrada humana. Los equipos de TI pueden, por ejemplo, emplear agentes de IA para rastrear los datos de los usuarios y detectar e investigar incidentes de fraude.

El uso cada vez mayor de agentes de IA subraya el valor de las herramientas personalizables impulsadas por IA para las empresas que buscan enfrentar desafíos únicos, refinar y automatizar sus procesos y mejorar la personalización.

La hiperautomatización también es tendencia para las empresas que desean optimizar la gestión de TI empresarial.⁵ La hiperautomatización utiliza IA, ML y RPA para crear un entorno único e interconectado que automatiza completamente los procesos del negocio de extremo a extremo. A diferencia de la automatización tradicional, que se enfoca en tareas aisladas, la hiperautomatización conecta y automatiza múltiples funciones interrelacionadas en una organización, creando un sistema automatizado más rápido, más cohesivo y más eficiente.

La automatización de autoservicio es cada vez más popular a medida que los desarrolladores intentan dotar a los diferentes departamentos de capacidades de automatización.⁴ En la actualidad, el 63 % de las empresas cuenta con más de 200 autómatas ciudadanos^.2

Las plataformas de código bajo y sin código están poniendo la automatización al alcance de usuarios no técnicos, ayudándoles a diseñar y gestionar flujos de trabajo automatizados mediante herramientas intuitivas de arrastrar y soltar. Estas plataformas de autoservicio aceleran la automatización y permiten a los usuarios implementar soluciones sin un amplio apoyo de TI.

Y con la ayuda de las estructuras de automatización (un enfoque que integra varias tecnologías y herramientas de automatización), los desarrolladores pueden entrelazar elementos fragmentados en una estructura de automatización unificada y fluida, alineando estrechamente las aplicaciones, los flujos de trabajo y los datos existentes.

Las estructuras de automatización abordan los problemas asociados con sistemas desconectados, datos aislados y procesos fragmentados. Los enfoques de automatización fragmentados aún pueden tener éxito cuando se llevan a aplicaciones especializadas que se destacan en funciones individuales, pero no se traducen bien a entornos de TI grandes y dinámicos donde los elementos deben funcionar bien juntos.

La estructura de automatización ayuda a las empresas a establecer un "sistema nervioso central" para sus arquitecturas de TI, lo que garantiza una comunicación clara y operaciones fluidas en toda la empresa.

La automatización de TI ofrece a las empresas de todos los tamaños varios beneficios significativos, que incluyen: