Sugerida por primera vez por el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST) de EE.UU. en 1977, la tríada CIA tiene como objetivo guiar a las organizaciones en la elección de tecnologías, políticas y prácticas para proteger sus sistemas de información. Los elementos de la tríada de la CIA incluyen:
- Confidencialidad
- Integridad
- Disponibilidad
Confidencialidad significa garantizar que las partes no puedan acceder a datos a los que no están autorizados a acceder.
La confidencialidad define un espectro de usuarios, desde usuarios internos con acceso privilegiado a gran parte de los datos de la empresa hasta personas externas autorizadas a ver solo la información que el público tiene autorización o permiso para ver.
La información personal debe permanecer privada. Los datos sensibles son sensibles. Si una persona no autorizada obtiene una contraseña de datos protegidos, se trataría de una violación de la confidencialidad.
Integridad significa asegurar que toda la información contenida en las bases de datos de la empresa sea completa y precisa.
Los procesos de integridad tienen como objetivo evitar que las personas manipulen los datos, por ejemplo, mediante adiciones, alteraciones o eliminaciones no autorizadas. La integridad de los datos se aplica para prevenir tanto a los adversarios que alteran los datos intencionalmente como a los usuarios bien intencionados que alteran los datos de manera no autorizada.
Disponibilidad significa asegurarse de que los usuarios puedan acceder a la información para la que tienen acceso cuando la necesiten.
La disponibilidad establece que las medidas y políticas de seguridad de la información no deben interferir con el acceso autorizado a los datos. Gran parte de la disponibilidad es sencilla, como trabajar para garantizar la solidez del hardware y el software para evitar que sufran caídas los sitios de una organización.