¿Cuáles son los beneficios del cloud computing?

Los beneficios del cloud computing son muy amplios. A continuación, las desglosamos en tres categorías principales:

• Flexibilidad: los usuarios pueden escalar los servicios para adaptarlos a sus necesidades, personalizar las aplicaciones y acceder a los servicios cloud desde cualquier lugar con conexión a Internet.

• Eficiencia: los usuarios empresariales pueden comercializar aplicaciones con rapidez, sin tener que preocuparse por los costes de la infraestructura subyacente ni por el mantenimiento.

• Valor estratégico: los servicios cloud proporcionan a las empresas una ventaja competitiva al poner a su disposición la tecnología más innovadora.

Hoy en día, el cloud computing está por todas partes y transforma continuamente la forma en que operan personas y organizaciones, desde las pequeñas empresas emergentes hasta las grandes empresas. Las empresas confían en el cloud computing para facilitar el teletrabajo y aprovechar tecnologías innovadoras como la inteligencia artificial (IA), el machine learning (ML) y el edge computing.

La infraestructura de cloud computing se basa en una red de centros de datos remotos, servidores y sistemas de almacenamiento que son propiedad y están gestionados por un proveedor de servicios cloud (CSP, por sus siglas en inglés) externo, como Amazon Web Services (AWS), Google Cloud Platform, Microsoft Azure e IBM Cloud.

Existen cuatro modelos principales de entrega en la nube:

• Nube pública

• Nube privada

• Cloud híbrido

• Multinube híbrida

En este modelo, los recursos informáticos, como aplicaciones de software listas para usar, máquinas virtuales (VM), infraestructuras y plataformas de desarrollo, se ponen a disposición de un proveedor externo a través de Internet. Según un estudio de IDC, se prevé que el gasto mundial en servicios de nube pública alcance los 805 000 millones de dólares en 2024 y se duplique en 2028.¹

Los cuatro tipos más populares de servicios de cloud computing son la infraestructura como servicio (IaaS), la plataforma como servicio (PaaS), el software como servicio (SaaS) y la tecnología sin servidor o serverless. La mayoría de las organizaciones empresariales utilizan una combinación de estos servicios como parte de su pila de prestación de servicios en la nube:

• Infraestructura como servicio (IaaS): acceso bajo demanda a recursos informáticos, de almacenamiento y de red.

• Plataforma como servicio (PaaS): acceso bajo demanda para desarrollar, ejecutar y gestionar aplicaciones.

• Software como servicio (SaaS): acceso bajo demanda a software de aplicación alojado en la nube listo para usar.

• Informática sin servidor: modelo de desarrollo y ejecución de aplicaciones que permite a los desarrolladores crear y ejecutar código de aplicaciones sin necesidad de aprovisionar o gestionar servidores o infraestructura de back-end.

Un entorno de nube privada destina todos los recursos de hardware y software a un cliente. Las empresas que deben cumplir normas reglamentarias estrictas o manejar datos confidenciales, como las entidades financieras o los proveedores de atención sanitaria, suelen optar por entornos de nube privada.

Esta arquitectura de cloud computing combina la nube pública, la nube privada y la infraestructura local para crear una única infraestructura de TI. Las organizaciones prefieren la nube híbrida por su agilidad, que les permite responder a los cambios y aprovechar las oportunidades de crecimiento mediante el aprovisionamiento rápido de recursos informáticos.

Una multinube híbrida integra varios servicios cloud de más de un proveedor dentro de la misma infraestructura de TI. Esta arquitectura ofrece a las empresas la flexibilidad necesaria para combinar lo mejor de los dos mundos del cloud computing a la hora de migrar, crear y optimizar aplicaciones en varias nubes.

El ecosistema híbrido multinube moderno permite el desarrollo de aplicaciones nativas de la nube (por ejemplo, microservicios) y utiliza una plataforma de orquestación de contenedores de código abierto como Kubernetes para automatizar la implementación de aplicaciones en centros de datos locales, la nube pública, la nube privada y entornos edge.

La flexibilidad se refiere a la rapidez con la que un producto o servicio puede adaptarse a necesidades y entornos cambiantes. La flexibilidad engloba las siguientes ventajas del cloud computing:

• Escalabilidad

• Opciones de almacenamiento

• Control

• Funciones de seguridad avanzadas

La infraestructura en la nube se adapta a la demanda para soportar cargas de trabajo fluctuantes. Por ejemplo, los proveedores de servicios en la nube pueden ajustar dinámicamente el ancho de banda en función del uso en tiempo real, aumentarlo automáticamente cuando se incrementan las ventas (por ejemplo, las ventas flash) y reducirlo cuando el tráfico disminuye.

Los usuarios pueden elegir entre opciones de almacenamiento en la nube pública, privada o híbrida en función del almacenamiento de datos, la seguridad que requieran y otras necesidades. Por ejemplo, los servicios de data backup y recuperación ante desastres (BDR) permiten a las empresas copiar y almacenar datos en un servidor remoto para protegerlos de cortes o daños. De este modo, las empresas pueden recuperarse de la corrupción de datos, los ataques de malware y otros desastres, y garantizar así la continuidad del negocio.

Las organizaciones pueden determinar su nivel de control con opciones "como servicio" ("as a service"). Además de SaaS, PaaS e IaaS, las organizaciones pueden personalizar aún más sus servicios en la nube con plataformas como la de integración como servicio (iPaaS).

iPaaS es un conjunto de herramientas basadas en la nube que se utilizan para integrar datos de varias aplicaciones alojadas en distintos entornos de TI. iPaaS ayuda a las empresas a hacer frente a la proliferación de SaaS.

Hoy en día, los proveedores de servicios en la nube ofrecen sólidas características de seguridad en la nube, como software especializado para proteger y asegurar datos, aplicaciones e infraestructura. Estas ofertas incluyen nube privada virtual (VPC), claves de interfaz de programación de aplicaciones (API), información de seguridad y gestión de eventos (SIEM) y mucho más.

La eficiencia en la nube se refiere a la capacidad de utilizar los recursos de la nube de la forma más óptima para reducir costes, minimizar el despilfarro y maximizar los resultados operativos. La eficiencia abarca las siguientes ventajas del cloud computing:

• Accesibilidad

• Rapidez de comercialización

• Seguridad de datos

• Ahorro de costes

• Estructura salarial

Una red global de ubicaciones en la nube hace que las aplicaciones y los datos basados en la nube sean accesibles desde prácticamente cualquier dispositivo conectado a Internet. Este beneficio permite a las empresas implementar cargas de trabajo en la ubicación más cercana a sus clientes con conectividad de baja latencia.

Las plataformas en la nube proporcionan una infraestructura que está fácilmente disponible, lo que permite desarrollar e implementar aplicaciones rápidamente, sin necesidad de gestionar hardware físico. DevOps y otros equipos de TI pueden probar, iterar y poner en marcha nuevos productos y servicios rápidamente. Esto permite a las organizaciones comercializar sus aplicaciones más rápidamente.

En la nube, las copias de seguridad en red ayudan a evitar la pérdida de datos en caso de fallos de hardware. La seguridad de datos en la nube permite a las organizaciones gestionar y proteger de forma centralizada la información sensible en una red distribuida. Las plataformas en la nube ofrecen medidas de seguridad avanzadas, como el cifrado y la monitorización de amenazas, que ayudan a minimizar el riesgo de vulneraciones de datos al tiempo que garantizan el cumplimiento de la normativa del sector.

El cloud computing utiliza recursos remotos, por lo que reduce la huella de datos de una organización. Este beneficio reduce el coste de adquisición, mantenimiento y actualización de servidores y otros equipos.

La mayoría de los principales proveedores de servicios en la nube ofrecen una estructura de costes de "utilidad", lo que significa que los usuarios solo pagan por los recursos que utilizan. Los precios de pago por uso permiten a los clientes disfrutar de un mayor control sin necesidad de firmar contratos a largo plazo.

Según un estudio del IBM Institute for Business Value, el valor derivado de un modelo tecnológico y operativo de plataforma híbrida multinube completa a escala es dos veces y media el valor derivado de un enfoque de plataforma única y proveedor de nube único. Entre las ventajas de valor estratégico del cloud computing se incluyen las siguientes:

• Productividad mejorada

• Actualizaciones periódicas

• Colaboración en equipo

• Ventaja competitiva

• Sostenibilidad

Los proveedores de servicios cloud gestionan la infraestructura subyacente, lo que permite a las organizaciones centrarse en el desarrollo de aplicaciones y otras prioridades. Las herramientas de automatización en la nube, como los paneles de control para estadísticas en tiempo real y los análisis de datos impulsados por IA, ayudan a reducir las tareas manuales y otras cargas administrativas.

Los proveedores de servicios en la nube actualizan periódicamente sus ofertas para proporcionar a los usuarios acceso a las últimas actualizaciones y tecnologías, como la IA generativa y la computación cuántica.

El acceso mundial significa que los equipos pueden colaborar a distancia en lugares muy lejanos.

Las organizaciones pueden moverse con más agilidad que sus competidores, que van por detrás en sus viajes de migración a la nube y deben dedicar recursos de TI a la gestión de la infraestructura.

Los servicios cloud ayudan a las empresas a reducir su huella de carbono mediante el uso de fuentes de energía renovables, la optimización del uso del espacio y el uso de tecnologías de refrigeración avanzadas.

A la hora de adoptar tecnologías y prácticas en la nube, las organizaciones deben tener en cuenta lo siguiente para aprovechar todos sus beneficios:

• Evaluar los sistemas y las cargas de trabajo existentes

• Elegir un proveedor

• Evaluar las necesidades de seguridad

• Gestione los costes de la nube

Una estrategia de nube comienza con el análisis de los sistemas internos, las aplicaciones y las habilidades del personal. Identifique las cargas de trabajo y determine dónde ubicarlas, ya sea en un entorno de nube privada o pública.

Esboce los casos de uso empresariales. Por ejemplo, una empresa de atención médica puede necesitar un entorno de nube privada para almacenar datos confidenciales de sus clientes y una nube pública para probar nuevas aplicaciones móviles para el servicio de atención al cliente.

Busque proveedores que puedan ofrecerle los servicios que necesitará a medida que evolucione su entorno de nube. Busque soluciones que puedan integrarse bien con las plataformas de otros proveedores si necesita asignar diferentes contratos de nube híbrida en un entorno de multinube.

Revise detenidamente los acuerdos de nivel de servicio (SLA) en la nube (contratos entre un proveedor de servicios y un cliente que definen el servicio y el nivel de rendimiento esperado). Los SLA están diseñados para satisfacer las expectativas de los clientes, responsabilizar a los CSP y ayudar a optimizar la experiencia del usuario final. Revise las condiciones y garantías relativas a la latencia, la disponibilidad de datos, el tiempo de actividad y el tiempo de inactividad.

La seguridad en la nube es una responsabilidad compartida entre el proveedor y el cliente. En este modelo, los proveedores de servicios en la nube siguen las buenas prácticas de seguridad y toman medidas activas para proteger la integridad de sus servidores. Por ejemplo, en un modelo PaaS, el cliente es responsable de proteger las aplicaciones, la carga de trabajo y los datos; el proveedor es responsable de gestionar y proteger la plataforma. Implemente un modelo de seguridad zero trust que aplique políticas de seguridad para cada conexión individual entre usuarios, dispositivos, aplicaciones y datos.

Monitorizar las métricas y comparar los datos cuando se utilizan varios proveedores de nube con diferentes paneles de control puede dar lugar a una proliferación de nube. Los CSP ofrecen herramientas de gestión de costes en la nube para ayudarle a realizar un seguimiento de facturas, características y otras configuraciones, lo que le permite optimizar los costes.