Las razones para no abandonar los estudios son claras: a los que abandonan los estudios les suele costar más conseguir empleo, ganan menos y declaran tener una calidad de vida inferior a la de los graduados. Alrededor del 8.5 % de los jóvenes de Canadá no obtienen su diploma de educación secundaria[1], algo que Compass for Success está decidido a cambiar.
Diane Findlay, directora de Compass for Success, señala: “Cuando las personas piensan en las tasas de graduación y abandono escolar, tienden a centrarse exclusivamente en los años de educación secundaria y a olvidarse de la experiencia de la educación primaria. Pero la educación es continua, y el progreso que realiza un niño durante los grados uno a tres en particular tiene un gran impacto en si se gradúan o no de la escuela secundaria”.
Por ejemplo, los estudios han demostrado que el 16 % de los niños que no leen con soltura al final del tercer nivel no se gradúan a tiempo.[2] Para aumentar las tasas de graduación y mejorar los resultados de los estudiantes, Compass for Success quería dar a las escuelas, tanto primarias como secundarias, insights más profundos de las experiencias de los estudiantes.
Diane Findlay explica: “Debido a que los maestros generalmente solo ven a sus alumnos durante la clase, no tienen idea de cómo se están desempeñando esos niños en otras clases, y mucho menos lo que sucede en casa. Hemos visto casos de estudiantes que atraviesan serios problemas personales y familiares, que afectan todo, desde la asistencia hasta la concentración y el comportamiento en clase, y la escuela no tenía una manera de identificar el problema. Si los docentes no son capaces de trabajar juntos y captar señales sobre por qué un niño empieza a comportarse de forma inusual, o de ofrecerle el apoyo adecuado, es probable que el rendimiento de los alumnos se resienta.
“Como dice el refrán, se necesita un pueblo para educar a un niño. No se trata solo de sus calificaciones y boletas, sino también de lo que pasa en casa. Queríamos que las escuelas pudieran identificar mejor a los alumnos en riesgo, por el motivo que sea, de quedarse rezagados, de manera que los docentes puedan intervenir y tomar medidas para evitarlo”.