La supervisión de la nube comprende una serie de estrategias y prácticas para analizar, rastrear y gestionar servicios y aplicaciones basados en la nube. A medida que las empresas escalan su infraestructura y su presencia digital, va cobrando más importancia la capacidad de los administradores de TI y los equipos de DevOps para mantener la visibilidad sobre el rendimiento de sus activos digitales. La supervisión de la nube ofrece una forma eficiente de lograr esta visibilidad y, al mismo tiempo, proporciona a las empresas información procesable para mejorar la disponibilidad y las experiencias de los usuarios.

Dadas las complejidades de la mayoría de los despliegues en la nube, la supervisión del rendimiento en toda una pila de aplicaciones y servicios en la nube puede llevar mucho tiempo y consumir demasiados recursos internos. Las soluciones de supervisión de la nube están diseñadas para agregar datos de rendimiento en tiempo real mediante herramientas automatizadas que realizan el seguimiento del rendimiento, la asignación de recursos, la disponibilidad de la red y otros indicadores clave de rendimiento (KPI) importantes relacionados con la nube. Con ello, el personal de TI obtiene visibilidad y control sobre toda su infraestructura basada en la nube.

Estas herramientas proporcionan prestaciones casi ilimitadas para identificar tendencias básicas en la actividad del usuario y juegan un papel fundamental para evitar tiempos de inactividad, cargas de trabajo con suministro insuficiente y posibles problemas de seguridad.

Otras prestaciones que brinda el software de supervisión en la nube incluyen:

• Supervisión continua (24x7) en tiempo real de máquinas virtuales, servicios, bases de datos y aplicaciones
  
  
• Visibilidad multicapa sobre el comportamiento de acceso a aplicaciones, usuarios y archivos en todas las aplicaciones y servicios basados en la nube
  
  
• Prestaciones avanzadas de creación de informes y auditoría para garantizar la conformidad con los estándares normativos
  
  
• Integraciones de supervisión del rendimiento a gran escala en entornos multicloud y de nube híbrida 

En el mercado actual encontramos varias herramientas de supervisión de la nube, cada una diseñada para una finalidad específica. Sin embargo, la mayoría de las soluciones de supervisión de la nube se pueden dividir en las siguientes categorías:

Supervisión de sitios web. Toda empresa necesita asegurar altos niveles de acceso, optimización y protección para sus sitios web y servicios web. Las herramientas de supervisión de la nube ayudan a identificar fallos de hardware menores y a gran escala e infracciones de seguridad, para que los desarrolladores y administradores puedan tomar medidas correctivas antes de que los problemas afecten a la experiencia del usuario.

Supervisión de bases de datos. Garantizar que el rendimiento y el estado de su sistema de gestión de bases de datos permanezcan intactos es una parte fundamental de la continuidad de negocio. Las soluciones de supervisión de la nube supervisan activamente los recursos de base de datos en la nube, los procesos de seguimiento, las consultas y la disponibilidad de los servicios para asegurar la precisión y la fiabilidad de los sistemas de gestión de bases de datos, independientemente del número de instancias y de cómo se desplieguen.

Supervisión del rendimiento de las aplicaciones (APM). APM es un componente vital de cualquier solución de supervisión de la nube y juega un papel fundamental para que sus aplicaciones se ejecuten sin problemas y de manera eficiente. APM mide la disponibilidad y el rendimiento de las aplicaciones, y proporciona a los equipos de desarrollo las herramientas que necesitan para resolver problemas rápidamente en el entorno de una aplicación. Las soluciones de APM ayudan a las empresas a mejorar la experiencia del usuario, cumplir con los acuerdos de nivel de servicio (SLA) de usuarios y aplicaciones, minimizar el tiempo de inactividad y reducir los costes operativos.

Las empresas actuales utilizan una amplia variedad de soluciones en local y basadas en la nube. Esta combinación de infraestructura y los procesos operativos que la sustentan puede dar lugar a entornos multicloud o de nube híbrida, que requieren una capa adicional de supervisión, mantenimiento y control. La supervisión de la nube ayuda a simplificar la administración de estos sistemas complejos, además de reducir la cantidad de recursos internos necesarios para su gestión.

Supervisión de la nube híbrida. Los entornos de nube híbrida combinan el uso de servicios de nube pública con infraestructura local privada. Esto permite que una organización mantenga los elementos confidenciales de su negocio —como datos de clientes y procesos de transacciones— en local mientras ejecuta otras aplicaciones y servicios en entornos de nube altamente escalables y fiables.

Sin embargo, una carencia de visibilidad integral sobre las aplicaciones y los servicios en un entorno híbrido puede dificultar la identificación y el tratamiento de fallos críticos o cuellos de botella en los conductos de desarrollo de software, el rendimiento de aplicaciones y sitios web, las configuraciones de red y otros procesos relacionados con la TI. Las soluciones de supervisión de la nube híbrida facilitan las integraciones con los datos de rendimiento del proveedor de la nube, lo que genera visualizaciones de datos fáciles de entender. Con ello, los indicadores clave de rendimiento (KPI) basados en la nube pasan a un primer plano, lo que permite a los equipos tomar mejores decisiones con respecto a la depreciación del servicio, el suministro de recursos de aplicaciones, la agilidad móvil y la gestión de bases de datos.

Supervisión de multicloud. Los entornos multicloud son similares a una nube híbrida en el sentido de que aprovechan el uso de una solución local en combinación con entornos informáticos basados en la nube, pero añaden la complejidad de utilizar varios proveedores de nube pública.

Ejecutar una configuración multicloud aporta a las organizaciones la flexibilidad de elegir los servicios de nube que mejor se ajusten a cada una de sus cargas de trabajo. Sin embargo, existen varios retos que pueden surgir cuando se trabaja en un entorno multicloud.

Un entorno multicloud añade complejidad a la gestión de la infraestructura, ya que es necesario gestionar las herramientas, los servicios y las configuraciones de red de la organización a través de varios proveedores de terceros. A ello hay que sumarle que cada proveedor de nube opera bajo diferentes SLA en relación con la disponibilidad, la conformidad y la seguridad, y es fácil perder el control de los gastos de recursos y escalabilidad general.

La gestión del rendimiento de las aplicaciones ayuda a mantener la coherencia de las experiencias de los usuarios en toda su infraestructura gracias a la supervisión de las señales de latencia, tráfico, errores y saturación. Con estos estándares unificados, las organizaciones pueden recibir notificaciones basadas en políticas a medida que surgen incidentes y ejecutar procesos automatizados para resolverlos rápidamente.

La migración a entornos híbridos o multicloud puede proporcionar muchas ventajas para las empresas en expansión, especialmente cuando su objetivo es ganar agilidad. Sin embargo, para sacar el máximo beneficio de sus despliegues basados en la nube, debe seguir algunas de las mejores prácticas estándar de supervisión de la nube.

Supervisión de la experiencia del usuario final. Si bien es necesario mejorar la eficiencia interna en torno a la gestión de procesos, el objetivo principal de todas las empresas debería ser supervisar y atender la experiencia del usuario en todos los niveles. Obtener información sobre cómo mejorar el rendimiento de sus aplicaciones y la disponibilidad para los usuarios puede tener un impacto significativo en sus resultados de negocio y en la sostenibilidad general de sus productos y servicios.

Hay dos formas en que las organizaciones pueden implementar la supervisión de la experiencia digital en un entorno empresarial:

• Supervisión sintética: también conocida como supervisión activa, la supervisión sintética proporciona simulaciones de puntos de vista del usuario final para proporcionar comentarios sobre el rendimiento de las aplicaciones en diversas condiciones. Esto le permite realizar evaluaciones comparativas y marcar puntos de referencia de toda la infraestructura conectada y de la forma en que responde a procesos complejos y cargas de trabajo pesadas antes de desplegar las aplicaciones, lo que ayuda a maximizar la disponibilidad y la fiabilidad general.
  
  
• Supervisión de usuarios reales (RUM): la supervisión de usuarios reales utiliza métricas de usuario "reales" para comprender mejor las experiencias digitales generales. RUM está diseñada para recopilar las actividades de todos los usuarios en tiempo real, siguiendo el trayecto del usuario mientras se mide el rendimiento de los servicios de backend, las métricas de rendimiento de las aplicaciones, los tiempos de carga del servidor y otros KPI.

En infraestructuras complejas y despliegues de nube híbrida, la supervisión sintética y de usuarios reales se aplican conjuntamente para proporcionar visibilidad completa sobre la experiencia digital. Esto incluye proporcionar un análisis detallado del rendimiento de la red, el backend y el frontend, así como información completa del usuario que permite a las organizaciones aislar problemas importantes y resolverlos.

Migración a una plataforma unificada. Equilibrar las necesidades de los sistemas locales y basados en la nube puede convertirse en una batalla constante que solo genere ineficiencias, falta de comunicación e inestabilidad del servicio. Al migrar todos los aspectos de su infraestructura bajo una plataforma de supervisión unificada, podrá gestionar de manera eficiente todos sus KPI desde un único sitio y dispondrá de visibilidad completa sobre la optimización del rendimiento.

Mayor automatización. La automatización de la supervisión de la nube proporciona a las empresas un incremento significativo de la eficiencia operativa, impulsada por la información y las señales predictivas. A través de soluciones de supervisión desplegadas en entornos de nube privada, pública e híbrida, las organizaciones disponen de una mejor visibilidad y control sobre todos los componentes de su infraestructura. Esta transparencia adicional proporciona a los equipos la capacidad de optimizar de manera efectiva todas las áreas de su negocio, incluido el rendimiento de sitios web, la gestión de recursos o la disponibilidad de las aplicaciones, entre otras.

Los servicios de supervisión de la nube ofrecidos por varios proveedores de nube tratan de eliminar la pesada carga de los equipos internos en relación con la supervisión del rendimiento y la gestión de aplicaciones y servicios alojados.

CMaaS (Cloud-Monitoring-as-a-Service: supervisión de la nube como servicio) es una solución de software popular para pequeñas o grandes empresas que quieran beneficiarse de un servicio de supervisión completamente gestionado en la nube para entornos virtualizados y de nube. Estas soluciones se ofrecen a través de proveedores de terceros y son supervisadas las 24 horas del día por expertos en el área de TI que tienen acceso a las últimas tecnologías y servicios de APM.