Hoy en día se habla mucho de sostenibilidad en todos los sectores. Supongamos, por ejemplo, que la empresa en la que trabajas ha puesto en marcha (o se está planteando poner en marcha) un programa para reducir sus propias emisiones de carbono.
¿Cómo puede estar seguro de que dicho plan tendrá un impacto? ¿Sus esfuerzos estarán respaldados por rigurosos datos científicos? ¿O estarán impulsados por deseos bien intencionados?
Teniendo en cuenta cuestiones como estas y centrándose al mismo tiempo en lograr un impacto creíble y demostrable en la inminente crisis climática, Downer Group (enlace externo a ibm.com), proveedor de servicios integrados especializado en transporte, servicios públicos y gestión de instalaciones, ha introducido cambios significativos en su negocio.
"Empezamos a centrarnos realmente en nuestra sostenibilidad medioambiental alrededor de 2008", recuerda Ricky Bridge, director general ejecutivo de Sostenibilidad y Medio Ambiente de Downer. “Nos dimos cuenta de que si íbamos a tomar en serio nuestro impacto, necesitábamos asegurarnos de que nuestra estrategia de sustentabilidad no fuera un enfoque secundario. Tenía que integrarse con nuestra estrategia comercial general”.
De hecho, en los 15 años siguientes, Downer reorientó el enfoque de su negocio. En 2008, la empresa tenía una fuerte presencia en el sector minero, y aproximadamente el 50 % de sus ingresos procedían, en particular, de la minería del carbón. Pero ahora, Downer se centra en líneas de servicios de menor capital y bajas emisiones de carbono en transporte, instalaciones y servicios públicos.
Y con esta transición, Downer comenzó a capturar y rastrear más datos, particularmente relacionados con su producción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Sin embargo, estos esfuerzos de seguimiento se basaban en gran medida en la recopilación y el procesamiento manual de datos, lo que suponía una carga para el personal y los recursos. "Solíamos decir que teníamos la tabla dinámica de Excel más grande del mundo para gestionar nuestros datos de emisiones de GEI", añade Bridge. "Ese nivel de esfuerzo no era sostenible y lo sabíamos".
"También teníamos que tener en cuenta el cumplimiento de la normativa", señala Nathan Brogden, director del Grupo de Clima y Sostenibilidad de Downer. “Tenemos un requisito regulatorio aquí en Australia, la Ley Nacional de Informes de Energía de Efectos Invernaderos, que nos obliga a recopilar e informar sobre datos ambientales relevantes. Pero reunir la información correcta a partir de hojas de cálculo era complicado y requería mucha manipulación”.
Por lo tanto, en 2017, Downer implementó una nueva plataforma para realizar un seguimiento de sus esfuerzos en materia de medio ambiente, social y de gobierno (ESG), una oferta que ahora se conoce como IBM Envizi ESG Suite.