La implementación de objetivos y resultados clave (OKR) puede ayudar a una organización a lograr una transformación ágil. Las organizaciones pueden utilizar los OKR para definir objetivos de transformación claros y resultados clave medibles para realizar un seguimiento del progreso.
“Lo que se mide, se hace” es una expresión que se escucha a menudo en los negocios y este concepto habla de por qué los OKR ayudan a habilitar el enfoque ágil.
Para lograr una mayor agilidad empresarial, una organización necesita objetivos claros en los que trabajar y un plan claro para lograrlos. Los OKR proporcionan un marco estratégico para alinear equipos, recursos y prioridades, lo que permite a una organización afrontar los retos de la transformación ágil y la transformación digital.
Los OKR se utilizan ampliamente por su capacidad para impulsar el enfoque y la responsabilidad en torno a las prioridades clave. La metodología OKR fue introducida por primera vez en Intel por Andy Grove en la década de 1970 y popularizada por el capitalista de riesgo de Silicon Valley, John Doerr, en su libroMeasure What Matters.1
Convertirse en una organización ágil es un objetivo ambicioso para muchas empresas. Los OKR ayudan a las organizaciones a ser ágiles al proporcionar un marco que ofrece numerosos beneficios, entre ellos:
Al establecer objetivos empresariales ambiciosos pero alcanzables, los OKR pueden ayudar a las organizaciones a concentrar en las iniciativas que impulsan la mayor realización de valor y el mayor impacto.
Los OKR pueden crear una comprensión compartida de las prioridades clave, ayudando a asegurarse de que todos estén priorizando los mismos objetivos de la compañía. Esta visión compartida permite a los equipos asignar recursos de manera efectiva y colaborar en objetivos estratégicos.
Los OKR pueden ayudar a involucrar a los miembros del personal al proporcionar un sentido de propiedad y propósito, así como vincular las contribuciones individuales a objetivos organizacionales más amplios. Con un marco ágil en su lugar, los equipos tienen mayor autonomía y libertad para la autoorganización, lo que promueve una mayor eficiencia.
Los OKR pueden promover la comunicación abierta sobre los resultados deseados, el progreso y los desafíos, alentando a los equipos a trabajar juntos y compartir insights para superar los obstáculos. Esta transparencia promueve una cultura de apertura y ayuda a las personas y equipos a comprender cómo su trabajo contribuye al objetivo general de la organización.
Los OKR proporcionan un marco claro para medir el progreso y responsabilizar a las personas y los equipos.
Con una infraestructura OKR clara para establecer y medir objetivos, los OKR Ágiles permiten a las organizaciones responder rápidamente a las condiciones cambiantes del mercado y ajustar sus Estrategias e iniciativas en consecuencia.
Ágil es una técnica de gestión de proyectos que ayuda a ofrecer una mejora continua, fomentar una mayor colaboración de todos los miembros del equipo y aumentar la eficiencia. Aunque los métodos ágiles se utilizaron originalmente para desarrollo de software, los equipos de una organización podrían beneficiarse de la adopción de estos métodos.
Los OKR complementan de forma natural las metodologías ágiles como Scrum, Kanban y Scaled Agile Framework (SAFe) al ayudar a las organizaciones a priorizar el trabajo, gestionar los recursos y medir los resultados. Al integrar los OKR con procesos ágiles, los equipos pueden:
Para lograr una transformación ágil exitosa, las organizaciones a menudo establecen OKR en toda la compañía que se alinean con sus objetivos de transformación. Un ejemplo de un OKR para toda la compañía para una campaña de transformación ágil podría ser:
Objetivo: implementar con éxito metodologías ágiles en toda la organización.
Este ejemplo muestra cómo los OKR de toda la empresa pueden alinear departamentos y equipos con los objetivos de transformación de la organización.
Además de los OKR de toda la empresa, las organizaciones pueden establecer OKR específicos por departamento para apoyar los esfuerzos de transformación Ágil y transformación digital. Por ejemplo:
Al implementar los OKR en el proceso de transformación ágil, muchas organizaciones siguen estos pasos:
Involucrar a los stakeholders clave y al personal en el desarrollo de los OKR puede ayudar a promover la alineación y la aceptación. Los actores clave pueden incluir ejecutivos y equipos de liderazgo, gerentes de producto, jefes de equipo y otros miembros del equipo. En esta etapa también se pueden identificar los propietarios de responsabilidades clave (KR), los maestros de scrum y el personal de soporte ágil.
Algunas organizaciones descubren que establecer una oficina de gestión de proyectos (PMO) ágil ayuda a implementar los OKR en un entorno ágil. Una PMO ágil puede facilitar el desarrollo de marcos ágiles que se alineen con los OKR. También puede ayudar a los equipos a realizar un seguimiento del progreso mediante métodos iterativos e incrementales.
Al definir objetivos y resultados clave, las organizaciones suelen aspirar a metas ambiciosas pero factibles que siguen el marco SMART: específicas, medibles, alcanzables, relevantes y con plazos determinados. Los resultados clave suelen estar directamente relacionados con los objetivos.
Además de definir los OKR, las organizaciones pueden identificar los indicadores clave de rendimiento (KPI) para ayudar a medir el rendimiento en comparación con los OKR.
Los OKR deben establecerse para un período definido (por ejemplo, anual o trimestral) y deben tener hitos y plazos claros. Establecer una cadencia para reseñas y actualizaciones periódicas de OKR puede ayudar a las organizaciones a mantenerse en el buen camino.
El personal puede necesitar formación y apoyo para comprender cómo funcionan los equipos ágiles y sus funciones tanto en las técnicas ágiles como en la metodología OKR. Un aspecto clave de la metodología ágil es que es en gran medida colaborativa y menos vertical que la gestión de muchas organizaciones tradicionales.
El seguimiento y la medición de las métricas OKR y los KPI pueden ayudar a la organización a comprender si realmente está progresando o si es necesario un cambio de rumbo.
Los controles periódicos, como las retrospectivas mensuales, a nivel de equipo, a nivel de empresa o ambos, pueden ayudar a garantizar que toda la empresa esté encaminada hacia el éxito de los OKR.
Los comentarios de OKR brindan la oportunidad de discutir el progreso y los desafíos y revisar sugerencias que aún están pendientes.
Si se necesitan nuevas acciones, los registros podrían proporcionar un infraestructura/marco que aliente sugerencias para futuras iteraciones y una oportunidad para intercambiar ideas sobre posibles soluciones.
Las organizaciones pueden utilizar insights basados en datos para informar su toma de decisiones y refinar los OKR para acelerar aún más su transformación hacia prácticas ágiles y un mayor éxito.